Woody Allen

He dicho que las últimas dos películas de Woody Allen se parecen un poco desde mi punto de vista y no precisamente porque la Johansen este en ambas (Scarlett no se supera en sus actuaciones, su mejor actuación ha sido Perdidos en Tokio,y eso fue hace mucho, eso merece otro post) Match Point me la he visto sin mentir al menos cinco veces completa y extrañamente no me canso de verla, me reafirma una y otra vez algo muy importante para mí, y es lo que veo ten las últimas películas de Allen, esa dicotomía, contradicción o paradoja entre los amores que yo llamo “destructivos” y los amores que te hacen “bien”.

He estado postergando escribir sobre Vicky, Cristina, Barcelona porque simplemente cuando sali de la película no sabía que pensar, no sabía que sentir, no tenía una posición clara con respecto a la película, quede medio confundida y aun no me la aclaro del todo supongo que tendré que verla de nuevo, y aun me siento así con respecto a esa película, y aunque no me den ganas de verla diez veces como Match Point, pues me la veré de nuevo a ver si cambian mis sentimientos y aclaro mis pensamientos.

Esto no me suele suceder en casi ninguna película, yo siempre salgo del cine con una opinión clara, una crítica clara, una postura definida, un sentimiento identificado, yo cada vez que salgo de una película siento que lo sé todo, pero con Vicky, Cristina Barcelona, no, no me ubico, y felicito a Woody Allen por haberme sorprendido de tal forma y haberme confundido de tal forma, casi nadie lo logra, eh, je.

La primera película de Woody Allen que me vi es viejísima, no recuerdo ni el nombre, era de un par de novios que iban al psicoanalista y juagaban tenis, y la vi por casualidad en la televisión, ni siquiera sabía que era de Allen y me engancho un poco, pero no lo suficiente, era tan vieja, no me gusta lo viejo, ni los libros viejos ni el cine viejo. Después me la volví a encontrar otra vez en televisión, después de unos meses, años quizá, y bueno me la vi y me gusto, y en fin después me la volví a ver increíblemente otra vez en televisión por casualidad ja, hasta ahora soy consiente de esto por dios.

Mi madre dice que no le gustan las películas de Woody Allene, evidentemente a mi madre no le pueden gustar las películas de Woody Allen, porque tratan de parejas que se “confrontan” el uno al otro, porque este señor es capaz de poner en pantalla las reales y verdaderas dilemas, problemas, tragedias y complicaciones profundas de las relaciones de pareja, si, la verdad es que no he visto ningún otro director que haga eso en realidad. Las películas de Woody Allen no son comedias románticas, no lo son! Las comedias románticas solo te dicen que el amor es perfecto (y a mi las comedias románticas me caen como un trasero!), Woody Allen te dice que el amor es un misterio, es complicado, es confuso, que hay amores diametralmente opuestos y que sin embargo por ser tan opuestos no dejan de ser amor.

Quizá por lo que me guste ver tanto Match Point una y otra vez es porque Woody nos muestra, me muestra que entre relaciones absurdamente pasionales, desbocados, que se nos tiran la vida y entre relaciones estables, sanas, que nos hacen crecer, más tranquilas y sosegadas, entre esas dos siempre, pero siempre hay que escoger sin que en una u en otra relación se excluya el amor, el amor esta en lo blanco y en lo negro, pero uno escoge, uno escoge que clase de amor quiere en su vida, pero lo que más me gusta de Allen es que nos dice, me dice: el amor puede estar tanto en la peor relación como en la mejor, y eso es tan cierto… el amor no excluye.

Quizá, lo que sentí cuando salí de ver Vicky, Cristina. Barcelona, haya sido tristeza, si, porque aunque la película es divertida y entretenida, al final es casi una tragedia, como en Match Point, Woody Allen quisiera decir en esta película algo como algo desesperanzador: ninguna relación funciona, ninguna, ni la mejor ni la peor, ni la pasional, no la tranquila, ni la sana ni la destructiva, ni la racional ni la emocional, ninguna, ninguna funciona, somos víctimas de esta dicotomía absurda y ridícula e incomprensible, quizá no quiera decir esto el director, pero así termina la película, sin esperanza, sin nada, sale uno como con un vacio, como con desesperanza, es jarto.

Y entonces que vamos a hacer Woody? Si ningún tipo de relación funciona, ni las más abiertas ni la más cerrada? Deberíamos equilibrarnos? Quizá Juan Antonio y María Elena deberían ser mas como Vicky y su esposos y viceversa, no?, quizá ningún extremo sea bueno, pero nosotros , los seres humanos, tendemos a irnos a los extremos, tenemos que equilibrarnos definitivamente.